La vida tiene un elevado porcentaje de rutina, y esto resulta muy positivo, puesto que sería muy caótico y agotador vivir permanentemente en la improvisación. Es por ello que una relación de pareja necesariamente implica la aceptación de cierta dosis de rutina, pero no se trata de que se instaure la monotonía en la pareja, también hay que dejar espacio a la creatividad y a poder sorprender al otro con pequeños gestos y acciones en el día a día.
Cuando la rutina en la pareja se prolonga durante mucho tiempo produce sensación de tedio y aburrimiento, se pierde la ilusión de realizar planes en común, el silencio va ganando terreno a la conversación, y puede llegar el día en que uno o ambos miembros de la pareja se pregunten por qué siguen juntos.
La rutina es uno de los principales factores de riesgo que pueden deteriorar una relación. Es fundamental que la pareja planifique actividades en común que motive a ambos miembros y rompan con lo de siempre, y que el factor sorpresa también forme parte de la relación para disfrutar plenamente de la vida en común.
En Mens Sana Psicología ayudamos a recuperar las ganas de sorprender al otro, de romper con lo de siempre, ayuda a evitar la monotonía, el exceso de rutina y, sobre todo, ayuda a recuperar la necesaria ilusión.